Un allanamiento para detener a un vecino que había sido condenado por un robo derivó en el sorpresivo hallazgo de un vivero indoor de marihuana y el secuestro de 61 plantas de cannabis sativa en un departamento de un edificio situado en el barrio porteño de Villa Urquiza, a pocos metros de un tradicional colegio.
Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. Todo sucedió en las últimas horas, cuando personal de la Policía de la Ciudad que recorría las calles para tareas preventivas fue derivado a Blanco Encalada al 5100 para concretar la detención de un vecino en el marco de una causa por robo, operativo ordenado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°9 porteño.
Cuando el personal policial llegó al edificio donde debían hacer el operativo, se encontraron con el empleado de una empresa de seguridad que, justamente, tenía que hacer un trabajo de mantenimiento de un sensor de humo en el mismo departamento que los uniformados debían allanar.
“Estoy esperando que llegue el propietario”, explicó el empleado de la empresa de seguridad. Entonces, los uniformados decidieron aguardar con él.
Al rato llegó el cliente. Pero no era el propietario del departamento que se debía allanar, era el inquilino.
“Se le pidió al inquilino que dejara ingresar al personal policial. La persona que se debía detener no estaba, pero los uniformados descubrieron que el departamento era un vivero de marihuana. A simple vista, uno se daba cuenta de que en la propiedad no vivía nadie, que era utilizada para cultivar cannabis sativa” sostuvo a LA NACION una fuente judicial.
Se trataba de un departamento de tres ambientes. En todas las habitaciones había plantas de marihuana de distintos tamaños.
Primero se hizo una consulta al TOC N°9 porque había ordenado el operativo. Pero como se trataba de un caso que, por sus circunstancias, podía ser materia de investigación del fuero federal, hubo una comunicación con el juzgado de la magistrada María Servini, pero finalmente, la causa quedó a cargo del fuero penal, contravencional y de faltas de la ciudad de Buenos Aires porque se debía investigar como narcomenudeo.
Tomó intervención el auxiliar fiscal José Guerrero, de la Unidad de Flagrancia Norte del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, con la colaboración de personal de la Comisaría Vecinal 12C.
Se ordenó la detención del inquilino que fue indagado, pero se negó a declarar. La investigación continuará en la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Delitos Vinculados con Estupefacientes (Ufeide), a cargo de la fiscal Cecilia Amil.
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