Crece la preocupación en el sector agropecuario debido al proceso de ajuste que enfrenta el INTA, se habla del cierre de diferentes agencias de extensión, además de retiros voluntarios y jubilaciones adelantadas, lo cual podría afectar la innovación del agro en el futuro. Es por eso que para analizar este tema, este medio conversó con la ingeniera agrónoma, Paulina Lescano.
Hubo negociaciones para que no haya despidos inmediatos en el INTA
El plan inicial contemplaba la reducción de 1.500 empleados, pero tras negociaciones con gremios y el consejo directivo, se acordó un ajuste menor. “Se cerrarán 41 agencias de extensión y una estación experimental en el AMBA, aunque no habrá despidos inmediatos”, explicó Paulina Lescano. No obstante, la incertidumbre persiste respecto a la reubicación del personal afectado.
Cuáles son las estrategias de ajuste que planea implementar el Gobierno
Entre las medidas contempladas, se plantean retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas. “Se ha propuesto a ciertos empleados retirarse con beneficios adicionales y a algunas trabajadoras adelantar su jubilación“, comentó Lescano. Además, se está revisando la cantidad de licencias prolongadas por enfermedad, buscando optimizar la estructura del organismo.
Para la entrevistada, “el INTA tiene funciones clave en la investigación y desarrollo agropecuario en Argentina”, y cualquier reestructuración debe realizarse sin comprometer su capital humano. A su vez, destacó que, “dentro de una estructura tan grande, es normal encontrar profesionales altamente calificados junto a otros empleados incorporados por cambios políticos“.
La motosierra en el INTA podría traer consecuencias para la investigación y el agro
El cierre de estaciones experimentales y la reducción de personal podrían afectar la capacidad del INTA para generar innovación en el sector. “La eficiencia puede mejorarse, pero es esencial preservar el talento y los científicos que han posicionado al INTA como una referencia internacional”, advirtió Lescano.